Educación Especial
La Ley General de Educación (1993), define y establece la atención educativa a la diversidad de la población mexicana, por lo que hace explĆcita laĀ no exclusiónĀ de poblaciones o individuos. A partir de esa fecha, se reorientaron los servicios de educación especial con el objeto de evitar la discriminación y la segregación y se buscó atender a todos los niƱos con discapacidad preferentemente en la escuela regular para promover su integración educativa y social. No obstante, en el Programa de Desarrollo Educativo 1995-2000 se reconoció que, a pesar de que, se habĆan realizado esfuerzos considerables para atender a los menores con discapacidad, el porcentaje de cobertura de atención era pequeƱo. En el Programa Nacional de Educación 2001-2006, se reconocen los esfuerzos para alcanzar una educación de calidad para todos, pero tambiĆ©n se advierte que no se han cubierto todas las metas propuestas en el sistema educativo.
En el Programa Nacional de Fortalecimiento de la Educación Especial (EE) y de la Integración Educativa (2002), se seƱalan como factores de la situación de la EE los siguientes: imprecisión en los servicios de educación especial; la ambigüedad del concepto de necesidades educativas especiales que llevó a la confusión respecto a la población que debĆa ser atendida; las dificultades en las relaciones entre la escuela regular y la especial; la falta de lineamientos sobre la organización y el funcionamiento de los servicios de EE; y, la insuficiencia de recursos humanos, financieros y materiales, entre otros. Como resultado de estos anĆ”lisis se fijaron diversos objetivos, lĆneas de acción y metas que en su momento serĆ”n evaluadas. Lo cual coincide con lo seƱalado por la UNESCO en 2003, en cuanto a la necesidad de revisar los planes de acción y estrategias para la educación integradora.
Es claro que, ante la reorientación de los servicios de educación especial, la cobertura de atención existente en México y las metas establecidas, sea urgente incrementar de manera permanente los esfuerzos para formar profesionales altamente capacitados, a fin de que se favorezca la atención a la diversidad y se incida en la calidad de los servicios que se ofrezcan.
Intervención Temprana
En numerosas ocasiones se ha seƱalado la importancia que tienen los primeros aƱos de vida para el desarrollo ulterior del ser humano. Durante este periodo, el crecimiento fĆsico, incluida la mayor diferenciación del sistema nervioso central, posibilita el aprendizaje de una manera mĆ”s acelerada que en cualquier otra etapa de la vida; de aquĆ que, sea un hecho aceptado que los repertorios establecidos durante la temprana infancia determinarĆ”n la adquisición de los repertorios posteriores. La intervención temprana ha sido definida como la posibilidad de proporcionar al niƱo, desde su nacimiento, las experiencias que promuevan su desarrollo integral, considerando sus necesidades, capacidades y maduración actual; sin olvidar que, en tales experiencias la relación adulto niƱo es la mĆ”s importante para optimizar el desarrollo del pequeƱo. El fin Ćŗltimo, consiste en crear un ambiente āfĆsico y socialā adecuado para mejorar la calidad de vida del infante. En este sentido, la vigilancia del crecimiento y desarrollo a partir del nacimiento, adquiere relevancia, pues, permite: identificar tempranamente riesgos de enfermedad o muerte; prevenir la desnutrición; involucrar a la familia y a la comunidad en las acciones pertinentes; identificar oportunamente a aquellos niƱos cuyo desarrollo estĆ” en riesgo y actuar en consecuencia; y, enlazar la vigilancia del desarrollo a diversas acciones preventivas.
Brindar atención a infantes y niƱos preescolares con retardo en el desarrollo o discapacidades, deberĆa constituirse como una prioridad nacional, sobre todo, para aquellos niƱos que se encuentran en situaciones de riesgo y vulnerabilidad que pueden afectar su desarrollo y, por tanto, su futuro; de ahĆ la importancia de la intervención temprana para dichos menores y las familias de las cuales dependen. De manera especĆfica, las actividades de formación en la Residencia en Educación Especial se centran en: a) la detección, la evaluación y el diagnóstico del desarrollo; b) la elaboración y aplicación de programas de intervención temprana, desde una perspectiva interdisciplinaria y preventiva; y, c) la elaboración de estrategias de incorporación de la familia y la comunidad, para la instrumentación de programas de atención temprana dirigidos a toda la población infantil.
Intervención en Educación BÔsica
Los modelos ecológicos que abordan el estudio de fenómenos educativos, plantean que los alumnos estÔn implicados en múltiples ambientes en los que juegan diversos papeles; en cada uno de ellos, se espera muestren ciertos comportamientos, lo que en ocasiones crea conflictos que pueden deberse a la discrepancia existente entre la habilidad del individuo para llenar los requisitos del ambiente, o bien, porque éste no satisface las necesidades del sujeto. Un aspecto clave de estos modelos, es que modifican el planteamiento que afronta el fenómeno educativo, centrÔndose sólo en la persona al proponer el estudio de la relación entre ésta y los diversos elementos de su medio. El enfoque ecológico, es considerado como un marco para guiar la manera en que se piensa acerca de la escuela y el aprendizaje; esto adquiere particular relevancia, cuando se busca determinar la manera en que se manifiestan las necesidades educativas especiales de niños con o sin discapacidad desde el inicio y, a lo largo de su aprendizaje escolar.
La escuela constituye un hĆ”bitat creado por el hombre, ubicado de manera particular en un ecosistema conformado por aspectos polĆticos, sociales, jurĆdicos, económicos, culturales y educativos. El reto actual de lograr la integración educativa y social, requiere de la colaboración entre los diferentes profesionales que de manera conjunta, propicien que los niƱos con necesidades educativas especiales con o sin discapacidad, reciban la educación apropiada al interior de la escuela regular durante su permanencia en la educación bĆ”sica y favorecer los procesos de transición a otros niveles educativos y de desarrollo. Bajo este marco, se fundamentan tanto la formación profesional como las actividades que se desarrollan en los escenarios educativos donde participa esta Residencia.
Ingreso
Perfil de ingreso
Es deseable que los alumnos que ingresen al programa, cuenten con las siguientes caracterĆsticas:
- Gran sensibilidad y compromiso con las necesidades sociales y educativas de la población blanco
- Habilidad para valorar una situación problema y ofrecer sugerencias alternativas o propuestas de solución, apegadas al contexto y las posibilidades reales de los involucrados y de las personas que interactúan mÔs cercanamente con ellos.
- Con una actitud Ʃtica, reflexiva y responsable en su desempeƱo acadƩmico y profesional.
- Que tengan una sólida formación en las Ć”reas de PsicologĆa, PedagogĆa, u otras afines.
- Que cuenten con un buen nivel de habilidades de redacción, comprensión de lectura en idioma Inglés.
Requisitos de ingreso
Para ingresar al plan de estudios, los candidatos deberƔn satisfacer los siguientes requisitos:
⢠Contar con tĆtulo o acta de examen profesional de licenciatura en psicologĆa o en Ć”reas afines previa aprobación, en su caso, del ComitĆ© AcadĆ©mico del Programa.
⢠Tener promedio mĆnimo de 8 en el Ćŗltimo grado de estudios cursados.
⢠Aprobar exĆ”menes de conocimientos generales y especĆficos de la Residencia en la que se desea formarse.
⢠Acreditar la comprensión de lectura de textos de psicologĆa en inglĆ©s, presentando constancia expedida por el Centro de EnseƱanza de Lenguas Extranjeras u otra institución reconocida o aprobada por el ComitĆ© AcadĆ©mico.
⢠En el caso de los aspirantes extranjeros cuya lengua materna no sea el español, deberÔn demostrar un conocimiento suficiente del idioma, presentando Constancia expedida por el Centro de Enseñanza para Extranjeros.
⢠Los estudiantes extranjeros deberÔn tener Visa de Estudiante al iniciar el proceso de admisión.
⢠Comprometerse a dedicar tiempo completo al plan de estudios (40 horas semanales).
⢠En caso de estudios realizados en el extranjero presentar los documentos apostillados.
Egreso
Perfil de egreso
Con base en el perfil propuesto para la MaestrĆa en PsicologĆa Profesional, los egresados de este programa, a travĆ©s de una actitud Ć©tica y del ejercicio responsable del quehacer profesional, contribuirĆ”n a promover, restaurar, mantener y/o mejorar positivamente el desarrollo óptimo y el bienestar de las poblaciones con necesidades educativas especiales, con o sin discapacidad. Las competencias bĆ”sicas del egresado, se orientan al desarrollo de las funciones profesionales de: anĆ”lisis, diseƱo, evaluación, intervención, prevención e investigación. AdemĆ”s, en el perfil profesional especĆfico a la residencia en Educación Especial, se incluyen los conocimientos, habilidades y actitudes siguientes:
a) Mostrarse abierto, tanto al conocimiento de los diversos procedimientos de evaluación e intervención existentes en el campo de la psicologĆa y de la educación especial, como al avance que se ha generado en el conocimiento mismo de esta Ć”rea.
b) Tener la capacidad de trabajar tanto de forma independiente como de participar conjuntamente con los diversos profesionales que orientan su labor en este campo.
c) Ser capaz de analizar las problemĆ”ticas existentes manteniendo una visión integral de las mismas y de explicar la interrelación entre actores āalumnos, familias, docentes, administradores escolaresāy elementos āprogramas escolares, tareas, administración escolar, polĆticas educativas, salud y culturaā.
d) Considerar ademĆ”s del conocimiento cientĆfico, las prioridades manifestadas por las personas con necesidades educativas especiales, con y sin discapacidad.
e) DiseƱar, elaborar y aplicar, de acuerdo con la metodologĆa cientĆfica, instrumentos de evaluación, programas de intervención y materiales didĆ”cticos acordes con las caracterĆsticas y necesidades de los usuarios, en cualesquiera de los Ć”mbitos establecidos.
f) Desarrollar modelos conceptuales que, basados en los avances de la psicologĆa, permitan diseƱar, programar, analizar e integrar investigaciones que aporten soluciones reales a las problemĆ”ticas existentes en educación especial.
g) Llevar a cabo una evaluación permanente en cuanto a la pertinencia de las acciones propias y sus repercusiones, tanto en las tareas profesionales como de investigación, con objeto de mantener altos estÔndares de calidad.
h) Integrar y actualizar los conocimientos metodológicos, teóricos y prÔcticos adquiridos a lo largo del programa de residencia y comprometerse a difundir de manera verbal y escrita los resultados de su actuación profesional y de investigación, a fin de enriquecer el desarrollo de este campo.
i) Mantener una actitud comprensiva y respetuosa hacia las caracterĆsticas de las personas con requerimientos de educación especial, sus familias y sus particularidades culturales.
j) Contribuir al avance y difusión de la disciplina, con base en el reconocimiento de su identidad como profesional o investigador de la psicologĆa orientada al campo de la educación especial.
k) Ejercer su profesión con un desarrollo crĆtico, responsable y comprometido con la sociedad en general.
Requisitos de permanencia
El sistema de evaluación del desempeño académico y profesional, serÔ permanente a lo largo de los cuatro semestres, en él se considerarÔn factores tales como:
a) Capacidad de comprensión de la lengua oral y escrita.
b) Capacidad para el desarrollo de anĆ”lisis crĆticos, tanto de los materiales bibliogrĆ”ficos y hemerogrĆ”ficos, como de la prĆ”ctica supervisada.
c) Destrezas metacognitivas de los estudiantes en las que muestren el control de sus propios procesos de aprendizaje y se refleje una actitud autoinformativa permanente.
d) Capacidad de solucionar problemas y tomar decisiones.
e) Disposición para el trabajo, tanto en equipo en los escenarios educativos como, en la comunidad.
f) El grado de compromiso y ética mostrado durante su formación profesional.
g) Participación semestral en foros académicos, que permitan la interacción de alumnos y profesores de las diferentes sedes y programas, y por tanto, la colaboración en la retroalimentación del programa mismo de la residencia.




